Cenote Dos Ojos. Foto Henry Watkins (Fisheye)
Las reglas de buceo en caverna son pocas, pero es muy importante seguirlas para asegurar una buena inmersión.
Estas reglas son aceptadas por organizaciones internacionales, tanto de buceo recreativo como técnico, por la comunidad de buceo espeleológico regional y los propietarios de las zonas con cenotes.
Cenote Car Wash. foto Spino Spinelli.
1 No exceder la distancia máxima a una zona abierta; 60 metros (200 pies).
2 No entrar en pasajes pequeños, cuando menos deben caber dos buzos cómodamente, uno junto al otro en todo momento.
3 No entrar a zonas donde se pierda de vista una fuente de luz natural, cabe mencionar que los lugares mas allá de estos límites son considerados como zona de cueva.
4 No exceder el número máximo de cuatro buzos de tanque sencillo por guía de tanques dobles.
5 Utilizar por lo menos una lámpara por buceador, esta lámpara debe estar encendida en todo momento durante la inmersión.
Cenote Car Wash. foto Spino Spinelli
6 Tener un control adecuado de foltabilidad neutra.
7 Realizar el recorrido utilizando como referencia visual la linea guía o "linea de vida", recuerda, es una referencia visual, no la toques y no bucees por debajo de ella.
Cenote Dos Ojos. Foto Henry Watkins (Fisheye)
8 Seguir las indicaciones del guía, sobre todo las referentes al suministro de aire por tercios, comunicación con señales de lámpara, postura, orden en la linea, no tocar o tomar ningún objeto de la caverna y conducta general de los buzos.
9 No utilizar tubo de snorkel, así como equipo innecesario, tales como boyas, guantes, carretes, cuchillos, etc. No llevar mangueras colgando.
10 No hacer buceo de caverna por la noche, sin la luz natural, la caverna se convierte en cueva.
Cenote The Pit. Foto Luis Leal.
Las reglas para buceo en caverna se dan a partir del análisis de incidentes y accidentes en cuevas y cavernas, estadisticamente son cinco las razones por las cuales se producen dichos accidentes:
Falta de entrenamiento adecuado para incursionar en lugares potencialmente peligrosos.
No tener una linea continua o "linea de vida" desde donde esté el buzo hasta aguas abiertas.
No tener mínimamente un esquema de tercios en el consumo de aire.
Sobrepasar los límites de profundidad acorde a nuestro entrenamiento.
No llevar las luces necesarias.
Cenote Dos Ojos. Foto Henry Watkins (Fisheye)
En los recorridos de caverna encontraremos una linea de color amarillo, estas lineas son permanentes y están puestas de tal manera que siempre nos darán un recorrido absolutamente seguro, donde no tendremos que preocuparnos por lugares estrechos, sin luz natural, lejos de alguna salida, etc. y que nos dará la garantía de tener un buceo espectacular.
Cenote Dos Ojos. Foto Henry Watkins (Fisheye)
Es muy importante que siempre sigas la linea de vida, no la pierdas de vista y no permitas que tu guía se salga de ella.
Recuerda vigilar tu consumo de aire, ya que por seguridad la duración del recorrido depende de la cantidad de aire que tienes en el tanque, esto se hace con la regla de tercios.
Al iniciar tu inmersión tu tanque debe estar lleno (3000 psi o 210 bar) divídelo en tres partes, el primer tercio es para entrar en la caverna, el segundo tercio es para salir de ella y el último tercio es de reserva, cuando tu manómetro indique 2000 psi o 140 bar avisa a tu guía, es el momento de iniciar el regreso.
Cenote Dos Ojos, Bat Cave
Si bien la regla dice que siempre debes tener luz natural a la vista hay algunas pocas excepciones, en el cenote Dos Ojos hay un recorrido llamado Bat Cave, este es un gran domo muy decorado donde es posible salir a la superficie y observar las increíbles formaciones naturales y la vida del lugar, en este recorrido no tenemos mucha luz natural, pero tenemos superficie casi a todo lo largo de la linea, lo cual la convierte en aguas abiertas, existen unos pocos lugares como este, tu guía te debe informar cuando es posible hacer una salida a superficies, la regla debe ser siempre tener luz natural o superficie en el recorrido.
Las formaciones en una caverna son sumamente frágiles, el daño ocasionado por tocarlas es acumulativo e irreparable, recuerda, no toques ni tomes ningún objeto del interior de la caverna.
Actualmente es relativamente fácil conseguir cámaras sumergibles que nos permiten llevarnos recuerdos de nuestra inmersión, sin embargo las cámaras son siempre una distracción, si no tienes la suficiente experiencia para mantener tu flotabilidad neutra es mejor que pidas a un profesional que tome las fotos, el contará con equipos adecuados, personal capacitado y la experiencia para no dañar la caverna, esto te dará la oportunidad de disfrutar de tu buceo sin preocupaciones de ningún tipo, recuerda que la caverna tiene luz natural, pero en el mejor de los casos estarás en una penumbra que hace que tus fotos salgan movidas, el flash no es de gran ayuda, pues esta calibrado para iluminar espacios cortos, en tus fotos saldrán buzos en medio de una inmensa obscuridad, con el riesgo de que pierdas el control de tu flotabilidad y te hundas o que flotes de manera descontrolada, pudiendo dañar las delicadas formaciones en el interior de la caverna.
Además es muy posible que en la entrada de cenote te cobren un sobreprecio por el uso de cámara.
Cenote Dos Ojos. Foto: idiota tocando estalactitas.
Cenote Dos Ojos. Foto Henry Watkins (Fisheye)
Actualmente es relativamente fácil conseguir cámaras sumergibles que nos permiten llevarnos recuerdos de nuestra inmersión, sin embargo las cámaras son siempre una distracción, si no tienes la suficiente experiencia para mantener tu flotabilidad neutra es mejor que pidas a un profesional que tome las fotos, el contará con equipos adecuados, personal capacitado y la experiencia para no dañar la caverna, esto te dará la oportunidad de disfrutar de tu buceo sin preocupaciones de ningún tipo, recuerda que la caverna tiene luz natural, pero en el mejor de los casos estarás en una penumbra que hace que tus fotos salgan movidas, el flash no es de gran ayuda, pues esta calibrado para iluminar espacios cortos, en tus fotos saldrán buzos en medio de una inmensa obscuridad, con el riesgo de que pierdas el control de tu flotabilidad y te hundas o que flotes de manera descontrolada, pudiendo dañar las delicadas formaciones en el interior de la caverna.
Dedicado a Mayte Piera, amiga transatlántica, constructora de puentes.
